domingo, febrero 12, 2012

Estrategia 2012-2017


EL nefasto fallo de la Corte Europea de Justicia hace sentir su enorme y duradero impacto en el mercado de miel natural de exportación. Nos tomará un par de años recuperarnos.

El precio de venta FOB cayó de 3.6 dólares por kilo a la UE a 2.6 exportando a USA. Las transacciones con Europa están en su mínimo y USA tiene una sobreoferta que reduce el precio y privilegia las mieles claras (< 35 mm Pfund).

No hay mercado para todos a un valor sobre el costo de producción. Hoy enfrentamos una crisis de sustentabilidad. La que se verá agravada cuando comience la demanda de polinización y se considere la miel de arrastre.

Este golpe nos pilla como nunca desorganizados. La Agem brilla por su ausencia, Fedemiel en un derrotero propio y la RAN algo más articulada al Centro Nacional Apícola. La ASEAP aún en pañales. El gremio tiene una baja tasa de asociatividad (<40%) y es muy dependiente de las dadivas estatales para su articulación (Nodos, Consorcio, PDP, PAP, FIA, Prochile, APL, etc).

El botín del Estado hace difícil ponerse de acuerdo, muchos intermediarios que viven del proyecto no quieren que nos pongamos de acuerdo. Y al final, nunca hay dinero para invertir o saldar deudas de arrastre. A los productores tanto proyectismo pichiruche no nos sirve.

SIG SAG, Coexistencia y Compensaciones
Lo que piden los europeos es simple y a la vez complejo. Quieren una miel libre de polen OGM, pero al no existir protocolos de análisis y muestreo homologados, no se puede aseverar el cumplimiento de esta restricción. Hay inseguridad jurídica. El mercado se tranca, se re acomoda.

Ya roto el concepto de Miel Natural, hoy incluyendo el código aduanero la nueva denominación de miel orgánica, queda la cancha abierta para una avalancha de distintivos, etiquetas y sellos. El nuevo mercado de la miel es distinguido, etiquetado, atomizado. Se impone la denominación de origen botánico, el sello geográfico, sin OGM, Orgánica, Bio, Fair, trazable, inocua.

La situación se estaría arreglando a través de la norma de las especificaciones en la etiqueta, donde Francia indica que si la miel fue producida allende 3 km de alguna plantación OGM, entonces puede decir Sin OGM en la etiqueta (sin análisis mediante). Alemania aboga por los 10 km y porque debe ser el ente estatal el que mantenga un registro de plantaciones y apicultores para hacer el cruce de las distancias.

¿Le creerán a un sistema chileno de certificación de localización? ¿Basta con esas distancias? ¿Se nos habrá escapado la genética modificada en algunos territorios? ¿Cómo enfrentamos los falsos positivos del CaMV?

Hay que incluir otras variables al modelo que opera el SAG y que se debe hacer público los supuestos de estos modelos. En el caso chileno me parece hay que excluir grandes cuerpos de agua y poner ciertas barreras topográficas por altura, en el entendido que esas barreras naturales cortan los desplazamientos apícolas.

El sector Apicola en conjunto con Anpros deben postular a un Fondo de interés publico para construir la arquitectura que permita hacer este monitoreo y ordenar el territorio en el marco de una coexistencia justa, que incluya las debidas compensaciones.

Esta arquitectura, probablemente en base a Opensource, será puesta a disposición del SAG para ofertar online el acceso a estos datos, para mejor decidir los movimientos apícolas y locación de semilleros OGM. Es una información que le sirve a ambos gremios y porque no, a otros sectores y público en general. La transparencia, el derecho a saber se imponen.

La clave está en las compensaciones y en los Registros.

FIMA y Compensaciones
En el sentido de las compensaciones Diego Santa Cruz ha estado trabajando con FIMA, la fiscalía para el medio ambiente (un buró de abogados con piel de ONG), que presentan una oferta muy conservadora para sumar causas individuales contra el Estado de Chile. Se habla de 500 UF de piso (200UF para una y 300 UF para otro mecanismo jurídico) y luego hacer una cucha para UF30 mensuales por 5 años. Diego debe presentar en más detalle esta Causa en el Cabildo de Los Angeles 2012 y debería pensar en un Stand de FIMA en el Simposio Araucania Agosto 2012 para simplificar sumarse a esta iniciativa.

Concuerdo con Diego que no hay que dejar abierta ninguna puerta. Si nos hubieran preguntado diríamos que NO; gracias, NO nos interesa perder el mercado europeo que claramente es anti transgénico y el que mejor nos paga por nuestra miel. De hecho eso lo dijimos en la Estrategia 2006-2011.

Pero no nos preguntaron y hoy perdemos el mercado europeo ¿quién nos compensa?

Esta es una pregunta que en parte se contesta con la acción con FIMA, pero sin duda que es parte de la agenda más amplia con Anpros y materia de preocupación legislativa del gremio. Debemos estar alertas a la Ley de Obtentores Vegetales y Regulación OGM en general. Este es un tema donde claramente los apicultores debemos ser escuchados.

Aunque nos cueste lograrlo, debemos enfrentar la relación del plantador de OGM con su entorno y lograr que se incorpore a los costos de la plantación las necesarias compensaciones por baja de precio de la miel por presencia OGM.


Registro
Hoy frente a la realidad de la autorización de plantación de semilleros para exportación a contratemporada no cabe más que organizarse y enfrentar de alguna forma los desafíos de la coexistencia.

El concepto de coexistencia se fundamenta en el debido registro y evaluación de las actividades en el territorio. Por un lado está el Registro de Semilleros Transgénicos y por el otro el Registro de Apicultores y Apiarios de Chile.

Ambos registros son materia de incumbencia del SAG.

Debemos entender de mejor forma el funcionamiento del SAG ante estos requerimientos. En el caso particular del Registro de Apicultores y Apiarios el trabajo que hace el SAG adolece de varios vicios institucionales que es necesario reparar. Las demandas a este registro por el lado del SAG vienen de su papel de “certificador” de exportaciones, básicamente para Europa. El famoso RAMEX y el menos conocido REEM. Por tanto este registro no incluye necesariamente a todos los apicultores (efectivamente deja fuera a los que se concentran en el mercado nacional o exportan a otros mercados o sólo polinizan) y no necesariamente tiene relación con variables epidemiológicas o de manejo de apiarios, más allá del registro de aplicaciones sanitarias, declaración de existencias y declaración de movimientos.

El gremio requiere un Registro de Apicultores y Apiarios de Chile más abarcador que las limitaciones institucionales del SAG. Este Registro me parece que debe ser una herramienta de los apicultores. Herramienta digital a través de la cuál el gremio interactúa con los sistemas estatales y otros gremios (Fedefruta, chilebio, anpros, conaf, sag, etc).

Este Registro, además de interactuar con la Zonificación de OGM, debe servir para los propósitos de Ordenar el Territorio, haciéndose cargo de los apiarios temporales (transhumancia), aplicaciones de agrotóxicos y alertas, capacidad de carga del territorio y pronostico para la temporada, denominación de origen, entre otros.

¿Cuál es el modelo de negocio para mantener funcionando en mejora continua el RaaCh? Capitalismos Popular a través del Centro Nacional Apicola? Cómo construimos las capacidades para operarlo y sacarle partido?

Ahora bien, ni el establecimiento de un proceso de mejora continua del SIG SAG para certificar nuestra producción, ni una demanda al Estado en busca de compensaciones económicas, solucionarán de forma más permanente esta exposición de la apicultura a los OGM hoy y vaivenes de mercado en general.


Campaña Demanda Interna
Me parece que la primera Dama se debe cuadrar con los apicultores incorporando la miel a su programa http://www.eligevivirsano.cl/ . La primera Dama debe lograr que Junaeb reemplace una cierta cantidad de azúcar por su equivalente en miel, aunque eso signifique subir el presupuesto en el ítem carbohidratos. Siempre coma Miel, elige vivir sano!!!

¿Cómo proveerse de la miel? Eso es un problema de Junaeb, pero probablemente una licitación pública bien pensada sería el mecanismo adecuado para activar a la cadena a una sana Coopetencia. El dólar a la baja no ayuda mucho, pero sin duda poder entregar unas 400 a 500 toneladas mensuales ayudaría a descomprimir las frustraciones en el marco de los precios antes de esta para-arancelaria Europea. Entre us$3 y us$4 por kilo al productor, es lo que necesitamos.

Y nosotros ¿Cómo nos ponemos? ¿En que ayudamos a aumentar la cuota de participación en el mercado interno? Compitiendo mano a mano con el azúcar, la stevia, los endulzantes, las mermeladas, el manjar, y otros ingredientes de nuestra cocina, la tarea de promoción de la miel necesita más de un día al mes por apicultor dedicado a la comercialización. ¿Cómo financiamos este esfuerzo educativo?.

Fiscalización Adulteración y Análisis Mieles
En el frente del Mercado Interno ya lo dijimos en el Congreso, necesitamos que el Ministerio de Salud fiscalice y castigue la miel adulterada. En ese segmento hay una buena cuota de mercado que hay que recuperar. Pero también debemos enfrentar en el mercado interno otras preguntas para la miel, partiendo por ¿con o sin Polen OGM? ¿niveles máximos de agrotóxicos en la miel? ¿Pas?

Se impone tanto para verificar capacidad certificadora del SIG SAG como para evaluar la presencia de agrotóxicos un programa de monitoreo plurianual de residuos en mieles y ceras. La información generada por un programa de este tipo deber ser acopiada en el Registro como parte de la información de apiarios.

Esta información areal y con amplia cobertura nacional nos permitirá cerrar el circulo de la inocuidad para validar la premisa que las abejas son el umbral. Ellas son el límite entre lo inocuo y comestible y los umbrales o límites mínimos de residuos.

Analizar la cera es imperioso para prevenir potenciales contaminaciones por sobre ese umbral que termine dañando la comercialización y acortando la vida de las abejas.


Agrotóxicos y otras materias legislativas
Pero nuestra estrategia apícola no se puede agotar en temas de mercado y compensaciones. Mantener a las abejas vivas es todo un desafío últimamente. Debemos pujar por un sistema de alerta de aplicación de agrotóxicos que nos permitan evaluar los impactos de estas aplicaciones y eventualmente abortar ciertos emplazamientos o hacer los manejos preventivos.

Debemos lograr sacar a los carbamatos del registro de agrotoxicos o al menos intervenir en su etiqueta de forma que se indique claramente que no se puede aplicar quedando flor en el huerto. La inclusión de un insecticida como raleador químico es un eufemismo que debemos suprimir. En el sentido anterior, mantener el apoyo como gremio a la iniciativa de Ximena Rincón que prohíbe plaguicidas de elevada peligrosidad (Boletin 6969) es una necesidad estratégica.

Debemos mejorar nuestro propio uso de estos pesticidas y evaluar la adición de sustancias noveles para el mejoramiento de la respuesta inmunológica y como preventivo para virosis y nosema. Debemos lograr un mecanismo de monitoreo de residuos en ceras y diseñar ciertos usos para sacar esa cera contaminada de los circuitos alimenticios y de iluminación. El rubro también está falto de algún monitoreo de resistencia de varroa a los principios activos más comúnmente utilizados y definición de haplotipos de varroa presentes en Chile.

La lucha contra la varroa nos acompañara por mucho tiempo y es sin duda el mayor desafío permanente de la industria.

Debemos lograr que se mejor fiscalice las importaciones de reinas de bombus. No puede ser que pasen del aeropuerto al huerto en particular con la comprobación de la migración intertaxa de ciertos virus y otras patologías intestinales. Se impone la realización de estudios de vigilancia activa de virus y distribución de nosema sp. en abejas como bombus introducidos como en la entomofauna nativa.

Urge hacer presencia sobre los parlamentarios que están viendo la ley de obtentores vegetales que generen la exclusión que proteja a las abejas y a los apicultores de potenciales reclamos de los dueños de dichas patentes de parte del trabajo de recolección de las abejas.
Ley hacia el futuro, no gracias, no los queremos. Nos basta con los semilleros y si se pueden excluir estos mejor aún.

Hoy por hoy, pareciera que la única opción posible es bien utilizar la herramienta de las ordenanzas municipales y la regulación del SAG, para, apoyados en el RaaCh, declarar zonas libres.


El Negocio Exportador
Parte de esta crisis se deben a la neglicencia de nuestros exportadores. Nuestra cadena se ha definido parte integrante del esfuerzo Chile Potencia Agroalimentaria y exportamos miel a granel al mercado europeo, principalmente al mercado Aleman.

Todo bien hasta que no nos cae una crisis como la presente con rasgos de para arancelaria. Una bomba OGM.

¿Por qué no hemos exportado envasado? ¿Por qué no agregamos valor diferenciando nuestras mieles?

Frente a esta incertidumbre jurídica se impone un cambio en la forma de operar en el negocio exportador. Debemos acercarnos al modelo de la fruticultura, donde el concepto es la “liquidación” al final de la temporada que refleja y salda las diferencias por el mercado objetivo logrado.

La exportadora paga un pie de 50% sobre el precio base (en este caso US$2 x ¿Ch$450? App Ch$900+iva por kilo) y la diferencia se salda al final de la temporada (o luego de la venta) comparando con el pago final recibido.

Este mecanismo implica abrir la contabilidad de las exportadoras, o al menos definir un protocolo de cálculo de gastos de operación y utilidades. ¿Cómo compartir los fondeos y fluctuaciones por el dólar?

1 comentario:

Anónimo dijo...

Una Pena... ahora ir a buscar a los culpables, Es decir a las empresas transgenicas que operan en Chile y que están por encima de ustedes y el bien común , gracias al lobby de los mismos politicos que la gente mantiene en Chile, demanda al estado por encubridor y a las semilleras, transgenicas.

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